Fideicomiso ciego y tuerto para unos y otros

Amigas y amigos: Esta semana, se llenaron las bocas de todos con los dineros y negocios sucios en el interior del Partido Socialista, demostrando que el negocio al interior de la política tiene tintes oscuros al margen de la ley, como una gran alternativa de financiar sus actividades partidarias a costillas de las empresas a las cuales tienen participación e intereses creados. E incluso, a mi me encantaría tener negocios millonarios, y seguir teniendo más dinero y ser rico, con el objetivo de no lucrar y tener un mejor pasar, sobretodo en las jubilaciones, que a nivel general son pésimas y que el futuro serán peores, producto a que todos los gobiernos de turno se resiste a realizar reformas a los fondos de pensiones, pese a tener comisiones presidenciales que analizaron el tema y que sus ideas se las puede llevar el viento, así de fácil.

Además, estos tipos del Partido Socialista, son querellantes en la causa del caso de la empresa SQM S.A. en donde están involucrados políticos como Jaime Orpis, Fulvio Rossi, Pablo Longueira, Pablo Wagner y Cristián Wagner; a parte de los otros involucrados  como el ex gerente general de la empresa Patricio Contese. y el máximo accionista de la empresa, Julio Ponce Lerou.

Varios de los partidos políticos han comentado sobre el Fideicomiso de Sebastián Piñera, como si fuera lo peor de lo peor, pero esos que critican pueden ser objeto de más criticas y cacerías de brujas entre los mismos partidos políticos, y pueden que los acuse por el hecho de que todos los partidos políticos, como el de a Nueva Mayoría y del Chile Vamos, que entre sus miembros tengan conflictos de intereses creados, y encuentro tan lindo como estos animales lucran. Hasta yo podría lucrar para tener más dineros sucios.

La historia del Fideicomiso Ciego data desde el 2005, durante el gobierno de Ricardo Lagos Escobar y cuando Sebastián Piñera era candidato presidencial. Fue así que en ese año que se publicó la Ley de Probidad en la Función Pública, que introdujo y reguló esta figura para la administración de activos, para evitar casos de conflicto de interés.

Si bien hubo otros intentos de parlamentarios y también del gobierno de retomar este tema -utilizado en varios países desarrollados-fue recién en 2011 cuando ya en La Moneda el propio Piñera envió un proyecto de ley denominado Probidad en la Función Pública, para regular y ordenar este concepto, retomando una idea original del primer gobierno de la Presidenta Bachelet.

El proyecto fue largamente discutido y fue recién el año pasado se aprobó, para ser publicado a comienzos de 2016. Respecto a la tenencia de acciones, bonos u otros instrumentos de sociedades inscritas en el país, la ley señala que los sujetos poseedores de títulos cuyo valor supere las 25 mil UF (unos $ 660 millones, aproximadamente US$ 1 millón) la autoridad tiene dos opciones: constituir un mandato sobre la totalidad de los activos, o bien vender el porcentaje que sobrepase dicho valor. Todo, en un máximo de 90 días luego de asumir la función pública.

Es decir, en lo que respecta al manejo de activos, sólo es mandato para valores emitidos en Chile y no en el exterior. Esta norma rige para el presidente de la República, ministros de Estado, subsecretarios, diputados, senadores, el Contralor General de la República, intendentes, gobernadores, consejeros regionales, alcaldes y jefes superiores de entidades fiscalizadoras. Mi dudas son, todos lo hacen realmente, son transparente entre ellos mismos para la ley, y que después lo niegan más de lo que esconden.

Como este proceso es voluntario, quizás algunos lo harán, lo harán a medias o simplemente no lo harán, y ellos estarán votando proyectos de ley con intereses creados.

Es necesario que el Fideicomiso Ciego sea obligatorio para todos y que declaren todos sus patrimonios personales que tengan, por la transparencia su gestión, pero eso no les conviene hacer por algo, el objetivo de cada político es enriquecerse más de lo que ya se enriqueció, y eso es aberrante, porque los conflictos de intereses van a estar presentes, tanto interna y externa. 

En año electoral, estos temas son muy de moda, pero por qué no pueden estar de moda en periodos no electorales, por qué tienen de moda que estar en año electoral, porque quieren llamar la atención para aparentar de lo que no es, o simplemente quieren tener vitrina para los medios, como acostumbra la clase política a ser figurines entre sí, la gran apuesta para engañar a la gente, la buena forma de hacer política y meterse el Fideicomiso Ciego al bolsillo,... y así será, unos para un grupo y otros para otro grupo, como si fueran tuertos. Gracias.