Algo más del ex Presidente de Perú, Alan García


Amigas y amigos: El escritor y ex candidato presidencial peruano Mario Vargas Llosa escribe dentro del movimiento del Realismo Mágico como una realidad mágica e imverosimil, pero increíble que no le basta con relatar para que esto sea tan mágico, y que por ende, ha sido una de las corrientes literarias más importantes  de mediados del siglo XX en América Latina, para bien o para mal que la realidad de nuestra región es increíble, que parece que solamente aquí pasan las cosas, y en este sentido, es lo que a pasado en Perú en donde los últimos cinco presidentes han y/o están teniendo problemas con la justicia, el primero es Alberto Fujimori, condenado a pasar tras las rejas 25 años por la matanza de 25 personas en la Cantuta,durante su gobierno; hasta Alejandro Toledo, Alan García, Ollaanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, a quienes se le acusa de haber recibido coimas en distintos momentos en su vida política por parte de la empresa constructora Odebrecht de más de US$20 millones, como el caso de Alejandro Toledo quien se encuentra prófugo en los Estados Unidos, demostrado en fotos que fueron tomadas por reporteros gráficos dando charlas.

Pero quien ha hecho noticias en las últimas semanas es Alan García, que ha pedido asilo en Uruguay por persecución política en su contra. La historia del Caballo Loco, que se le hizo conocido a Alan García es increíble, propio de historias literarias del propio Vargas Llosa, Asturias y García Márquez, hablando de un político de carisma único, capaz de convencer con sus palabras a las multitudes, tan así que no solo ha publicado libros, sino vino a dar charlas a Chile para promover la construcción del Proyecto Hidroaysén.

Alan García, hijo de perseguidos políticos y militante de su juventud del partido político el APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana), hijo predilecto de las figuras más emblemáticas e influyentes del socialismo latinamericano, Víctor Rául Haya de la Torre; así García con solo 35 años de edad, llegó a ser Presidente del Perú en 1985, sin embargo, la primera presidencia de García fue un fiasco, no solo su miedo fue entrentado por los horrores de la guerrilla Sendero Luminoso, sino en el programa económico inspirado en la idea del APRA que terminaron con una inflación de 7.500; esto deja la puerta abierta para que los peruanos, defraudados de los partidos políticos le dieran la oportunidad a Alberto Fujimori, pero... la historia de García no termina ahí.

En 1992, fue acusado de enriquecimiento ilícito durante su gobierno, lo que lo llevó escapando de las autoridades policiales, atrincherarse en la Embajada de Colombia en Lima y subirse por los techos de a legación, y esto se le concede como refugiado político por razones humanitarias, para irse a vivir a Colombia, específicamente en Bogotá, como en París, Francia, todo para que sus casos judiciales prescribieran.

En el 2006, los peruanos, y sabiendo lo ocurrido, le dan otra oportunidad a Alan García, ahora ejercía para dejar a Perú en una economía más libre y de mercado globalizada.

Hoy, Alan García se asila en la Embajada de Uruguay porque se le acusa de haber recibido dineros de parte de la empresa constructora brasileña Odebrechet, a cambio de la construcción la línea 1 del metro de Lima.

Habrá que ver que si su oratoria logra convencer para rendir cuentas a la justicia, sin embargo, mientras todo esto ocurre, en Perú el apoyo a la democracia y a su clase política cae y cae, pese a que es la mejor forma de gobierno, según ellos. Gracias. 

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