Grandes Chilenos de todos los tiempos: Malú Gatica


Amigas y amigos: Una de las figuras del mundo del espectáculo chileno e internacional que ha deslumbrado con su elegancia y belleza es Malú Gatica, una de las artistas nacionales de mayor prestigio internacional como cantante y actriz de cine, teatro, radio y televisión; e incluso, incursionó en el doblaje de series de televisión en México.

Su nombre verdadero es María de la Luz Enriqueta Gatica Boisier, nacida en el pueblo de Purén (la tierra natal del cómico y humorista Daniel "Bombo" Fica), al interior de la Región de La Aaucanía, el 15 de Enero de 1922, en la casona Boisier, dentro del fundo "El Fortín", de propiedad de la familia del colono francés José Boisier Bourgeaux, abuelo materno de la actriz. En este sitio vivió su infancia, en la casona de sus abuelos, recuerdos que revive en su libro Memorias para olvidar, donde hace referencia a los olores, los colores y los sabores de su ciudad natal Purén.

Con sus padres, el locutor y periodista Roberto Gatica y Leonie Boisier, se trasladaron a vivir a Nueva York, porque su padre fue contratado por la estación de radio de la NBC; ahí, Malú cursó sus estudios primarios y secundarios, continuando luego estudios en idiomas y música. Más adelante, en Buenos Aires, estudió teatro en el Conservatorio de Cunill Cabanellas, aunque su familia se opone, la mandan a Chile; igual a los 16 años, hace su debut como cantante en la radio de la NBC, pese a la oposición de su padre.

Devuelta en Chile, su habilidad artística la hacen debutar en los medios chilenos, primero en Radios Agricultura, en los programas estelares nocturnos como cantante. Cuando todavía no cumple veinte años, filma su primera película, Verdejo gasta un millón, en 1941, el mayor éxito chileno de taquilla en los principios de la década del 40. Al año siguiente reaparece en Verdejo gobierna en Villaflor, posteriormente viaja a Argentina, donde figura en dos películas.

Se casó cuando tenía 27 años con un norteamericano, lo que se traslada a México. El esposo se sintió atraído porque ella era artista, pero inmediatamente después del matrimonio empezó a sentir celos. Entonces le hizo la vida imposible. La actriz llegó a vivir un infierno. El fracaso matrimonial la afectó profundamente. Después de la separación decide dar vuelta la página, para abocarse completamente a su trabajo y cumplir la promesa que le había hecho a su madre de hacer todo bien.

En el país azteca, en los tres años de permanencia, aparece en más de una media docena de films, actuando además en teatro, junto a Gustavo Rojo y Gloria Lynch, luego vuelve a los Estados Unidos, por un tiempo breve con su esposo norteamericano, del cual se divorcian y pierde la custodia de su único hijo, de nombre León. Para Malú, la situación fue un dolor grande el alejamiento de su hijo. Las leyes de divorcio en Estados Unidos eran muy severas y distintas entre un Estado y otro. En Kansas, donde vivía, el procedimiento del divorcio tomaba sólo 6 semanas y en California, donde trabajaba, tomaba un año. Eso Malú lo ignoraba. Contrató un abogado en California y muy gentilmente le notificó a su marido que estaba iniciando los trámites de divorcio, que quería a su hijo y traerlo a Chile. Entonces recibió una carta más gentil aún que la de ella: no te preocupes ya estás divorciada y la custodia de nuestro hijo está con la abuela paterna. No tenía nada que hacer, Malú tenía un abogado y su suegra tenía cuatro.

Recién pudo retomar contacto con su hijo a los trece años, ya que el ex marido siempre buscaba excusas para impedir un acercamiento. Pese a tanto tiempo de ausencia, Malú declaraba que la relación con él fue buena. Si bien el niño creció con una suerte de amor y odio hacia ella, en cuanto la vio se sintió admirado por su figura y por lo que Malú ya representaba en ese tiempo.

Malú tuvo una exitosa carrera como cantante y actriz de teatro y cine, donde participa en Hollywood en algunas películas con Ralph Murphy, un realizador especialista en cintas menores de aventuras. Regresa enseguida a Chile, donde filma con José Bohr una de las mejores películas de la historia del cine chileno, El Gran Circo Chamorro, y luego, en un viaje a México, actúa en lo que para algunos es su mejor trabajo cinematográfico: Sábado negro, de Miguel M. Delgado, el director de la mayoría de las películas de Mario Moreno "Cantinflas", con quien tuvo una estrecha relación con la actriz, lo mismo con grandes figuras del mundo artístico como Orson Welles a quien admiró muchísimo; Marlene Dietrich, Gregory Peck y Zsa Zsa Gabor.

Los diarios estadounidenses hablaban por ese entonces de: La sensación sudamericana es una chilena; Malú Gatica, cuya belleza y voz hacen siempre noticia en el campo artístico, y que siempre se caracterizó por proyectar una imagen femenina, hablaba con suavidad, con movimientos pausados.

En 1960 parte a Europa, presentándose en Francia y España, y en 1962 retorna otra vez a Chile, volviendo a incursionar en el teatro y en la radio, éste último, conduciendo un espacio en Radio Portales; eso sí, vuelve a México e incursiona en el doblaje de series y películas provenientes de los Estados Unidos.

Dentro de sus actores chilenos favoritos, mencionaba a Alejandro Flores y Marés González. Según ella, decía que el actor sin ego no existe; es muy pretencioso pensar que uno merece estar arriba de un escenario y que la gente lo escuche, lo respete y lo entienda.

Malú Gatica participó en 51 obras de teatro, 24 telenovelas, 16 películas de cine fuera y dentro del país y escribió los libros "Memorias para olvidar" y "Lo que el tiempo se llevó", dejando uno sin publicar

En teleseries tuvo roles destacados, desde los inicios del género acá en Chile. Siempre en roles de carácter, donde mostraba su gran oficio y desplante. Inolvidable es el personajel de Misiá Felicia Echén, en La Represa, o el de Malva del Río, en La Torre 10, y así como muchos otros. Era además, una de las actrices favoritas de Arturo Moya Grau.

Falleció el 10 de agosto de 1997, víctima de cáncer. Su último deseo fue que sus cenizas pudiesen esparcirse en la plaza de su pueblo natal o en El Fortín, campo que perteneció a sus abuelos. Su hijo León, quien estuvo acompañándola hasta el último día de su vida, cumplió su deseo en las colinas del Fuerte.

Malú Gatica es recordada como una de las figuras más bellas y talentosas del espectáculo chileno e internacional, que de seguro, será inigualable. Gracias.


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